Lima (PGC). El partido de anoche entre Sporting Cristal y el
campeón ecuatoriano Emelec, sirvió además de marco para la despedida de uno de
los grandes jugadores que ha vestido la casaquilla Celeste.
Julio Andrade de Moura ”Julinho” fue homenajeado por el club
bajopontino, al cual le brindó lo mejor de su juego entre los años 1993 y 2003.
El “Garoto” jugó solo unos 12 minutos, que le bastaron para hacernos reordar la
picardía de su juego, obligando a la defensa ecuatoriana a olvidarse que era un
amistoso para frenarlo a la mala. Julinho hizo que los hinchas entonaran una
vez el cántico que lo acompaño durante el tri campeonato de los 90 y la Copa
Libertadors del 97, “Y ya lo ve, y ya lo ve, ese es Julinho y su ballet”. Luego
fue reemplazado por William Mimbela, y fue notorio como bajo el rendimiento del
equipo en pocos minutos.
El popular “Julinho” nos dejó un par de frases para el
recuerdo: "Mi corazón es celeste. Si alguien quiere ver mi corazón tiene
que ver el escudo de Cristal", arengó emocionado a la hinchada cervecera
que se agolpo a las graderías en regular número.
"Me siento como un niño que está debutando. Cristal
siempre fue mi vida, Cristal siempre será mi vida", culmino el brasileño a
su salida del campo de juego.
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