Por Javier Padilla Arias Diario El Bocon 21/06/2010
¿Este Cristal andaba embrujado? Puede ser. Porque hace seis fechas que no era el mismo equipo armonioso que empezó bien el Descentralizado, seguía en cama. Poseído por ese demonio que lo llevaba por mal camino.
Pero no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista, reza un viejo adagio popular. Y llegó Damián para acabar con la profecía en La Florida, para que el “Chino” Rivera recupere la fe, para que el Extremo Celeste renueve su romance con su equipo. Cristal venció 2-1 al colero Alianza Atlético. Su fútbol, tal vez por falta de confianza, no terminó de convencer. Pero fueron tres puntos al fin. Y a celebrar. Aunque quien primero ensanchó la sonrisa fue Teddy Cardama luego que el colombiano Julio Caicedo, sobre los 11’ de la etapa inicial, burlara la marca del celeste Yancarlo Casas y con remate bajo adelantó el marcador en el estadio San Martín. El meta José Carvallo sólo se estiró para la foto. Nunca llegó, ni por asomo. “Olelé, olalá, queremos jugadores que quieran campeonar”. El Extremo Celeste montó en cólera. Y exigían a sus jugadores que literalmente dejen la piel en la cancha. El mensaje, en tono desafiante, tocó las fibras del cuadro bajopontino, porque a partir de ahí todo cambió. El “Chorri” Palacios se puso el equipo al hombro, Miguel Ximénez empezó a “meter” miedo a la zaga rival. Así, la balanza se inclinó a favor del local. Y con goles de Ximénez, a los 36’ de la primera fracción, con golpe de cabeza, y de Damían Ísmodes, a los 8’ de la parte final, con remate colocado, firmaron la victoria rimense. Cristal volvió a ganar después de seis fechas. Y lo hizo porque creyó en sí mismo, en sus ideales, en sus objetivos. Y gracias a Damián se terminó su profecía.
Pero no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista, reza un viejo adagio popular. Y llegó Damián para acabar con la profecía en La Florida, para que el “Chino” Rivera recupere la fe, para que el Extremo Celeste renueve su romance con su equipo. Cristal venció 2-1 al colero Alianza Atlético. Su fútbol, tal vez por falta de confianza, no terminó de convencer. Pero fueron tres puntos al fin. Y a celebrar. Aunque quien primero ensanchó la sonrisa fue Teddy Cardama luego que el colombiano Julio Caicedo, sobre los 11’ de la etapa inicial, burlara la marca del celeste Yancarlo Casas y con remate bajo adelantó el marcador en el estadio San Martín. El meta José Carvallo sólo se estiró para la foto. Nunca llegó, ni por asomo. “Olelé, olalá, queremos jugadores que quieran campeonar”. El Extremo Celeste montó en cólera. Y exigían a sus jugadores que literalmente dejen la piel en la cancha. El mensaje, en tono desafiante, tocó las fibras del cuadro bajopontino, porque a partir de ahí todo cambió. El “Chorri” Palacios se puso el equipo al hombro, Miguel Ximénez empezó a “meter” miedo a la zaga rival. Así, la balanza se inclinó a favor del local. Y con goles de Ximénez, a los 36’ de la primera fracción, con golpe de cabeza, y de Damían Ísmodes, a los 8’ de la parte final, con remate colocado, firmaron la victoria rimense. Cristal volvió a ganar después de seis fechas. Y lo hizo porque creyó en sí mismo, en sus ideales, en sus objetivos. Y gracias a Damián se terminó su profecía.
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